
A pesar de las conclusiones alarmistas que se presentan en la prensa generalista, el estudio más grande hasta la fecha acerca del efecto de las pantallas sobre los adolescentes sugiere que su efecto en su salud mental es irrelevante: es casi igual al de comer patatas fritas con regularidad. En ese sentido, usar gafas es incluso peor que consumir pantallas.
Otros factores son mucho más graves
Investigadores de la Universidad de Oxford han realizado...